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Estás Buscando Tu Pasión En El Lugar Equivocado
Todos los consejos sobre la pasión se quedan cortos, enfocáte en esto:
Estás buscando tu pasión en el lugar equivocado.
La mayoría de la gente escucha el consejo de “seguí tu pasión” y en el fondo se frustra.
Piensan que no tienen una pasión, que su pasión no les va a permitir sostenerse económicamente o que la persona que lo dice tiene la suerte de haber encontrado lo suyo.
Otros critican la idea de seguir la pasión.
Justifican su crítica diciendo que la pasión es simplemente algo efímero, fugaz. Algo que no dura mucho tiempo. Entonces, no puede sostenerse en el tiempo efectivamente.
Pero creo que todas estas ideas no son del todo precisas, y se quedan cortos con las alternativas que podemos tomar.
Porque si sos como yo, y querés:
Levantarte motivado a enfrentar lo que te toca cada día
Esforzarte al máximo por algo que creés que vale la pena
Y sentir que sos bueno en lo que hacés y que avanzás hacia algo significativo…
Seguramente te interese descubrir dónde está lo tuyo.
Para conectar profundamente con lo que hacés, trabajar sobre problemas que te interesan genuinamente, y así encontrar maneras auténticas de resolverlos.
Porque es mucho mejor perder en un juego que disfrutás jugar, que ganar en el juego equivocado.
Entonces, hoy vamos a ver qué es realmente la pasión, en dónde tenés que buscar para encontrarla y qué trampas tenés que evitar para no quedar vacío:
Atrapado en un camino que es pasable. Mediocre pero soportable. Que lo único que hace es drenarte de energía, tiempo y ambiciones.
Esta es la parte 3 de cómo encontrar lo que te gusta. Acá está la parte 2 si no la leíste (ahí vas a encontrar también la parte 1.)
Lo que No es la pasión
Por mucho tiempo, pensé que la pasión era eso que te divertía. Eso que disfrutás constantemente, de lo que no te cansás.
Ese espacio en el que no encontrás obstáculos, no hay obligaciones, y todo fluye.
No podía estar más equivocado.
Y creo que la mayoría de la gente piensa en eso cuando habla de pasión. Pero si estudiamos a la etimología de la palabra, vamos a encontrar que la pasión está más atada al sufrimiento que al disfrute.
Tu pasión no es:
Seguir tu felicidad
Hacer lo que te divierte
Un camino sin obstáculos
Algo que te sale fácil y siempre disfrutás
Eso, por lo general, son tus hobbies.
Muchos piensan: hobbies = pasiones.
Y suelen confundir la idea de seguir su pasión con convertir sus hobbies en algo por lo que les paguen.
Pero yo no lo veo tan así (ya voy a explicar por qué).
Interpretarlo de esa manera trae ciertos riesgos y limitaciones:
Quizás tus hobbies no son del todo monetizables. Quizás los disfrutás porque lo hacés de vez en cuando. Quizás son actividades que te divierten por un tiempo, pero después perdés interés.
Tus hobbies no son tu pasión. Son lo que disfrutás hacer sin obligaciones.
Veamos un ejemplo que retrata el riesgo de convertir tu hobby en trabajo. Este ejemplo lo tomé de este podcast:
Chris Williamson da un ejemplo sobre una persona ficticia que juega al pickleball y se divierte jugando con sus amigos, digamos, los sábados a la tarde.
Entonces:
Si hace frío afuera, realmente no necesita ir a jugar.
Si está cansado, realmente no necesita ir a jugar.
Si tiene resaca, realmente no necesita ir a jugar.
No hay una obligación.
Pero supongamos que decide volverse profesional: "No veo la hora de convertir algo que amo en una carrera".
No se da cuenta de que:
Si hace frío afuera, igual tiene que salir a entrenar.
Si está cansado, igual tiene que salir a entrenar.
Y bueno, en realidad ya no puede tener resaca, porque el tipo que está entrenando mejor que él no sale la noche anterior a tomar algo con sus amigos.
Ahora tiene que trabajar en su técnica, hidratación, nutrición y mentalidad. Y probablemente ya no pueda ver tan seguido a su familia y amigos (por entrenamientos, torneos, etc.).
Todas estas cosas vinieron incluídas con la decisión de volverse profesional.
Ahora volvemos a vos. Pensá en tus hobbies.
¿Querés convertirlos en trabajo?
¿Estás preparado para sacrificar tu amor puro e inalterado por eso con tal de convertirte en el mejor en eso? ¿Por que te paguen?
¿Es un precio que estás dispuesto a pagar?
Si la respuesta es sí, genial. Encontraste lo tuyo. No leas más.
Pero si no es así, probablemente ese no sea el lugar en el cuál buscar tu pasión.
Porque no la vas a encontrar en las cosas que te gustan o que te divierten.
Entonces, veamos dónde se esconde.
Lo que Sí es la pasión
Siguiendo el ejemplo, tu pasión va a estar detrás de aquello por lo que estés dispuesto a sacrificarte. La pasión es sacrificio voluntario.
Son los obstáculos con los que estás dispuesto a lidiar, los sacrificios que estás dispuesto a hacer.
Tu pasión es:
Una elección consciente de los obstáculos que elegís enfrentar
Algo que te desafía, en el mismo sentido que un juego te desafía
Algo que para otros es tedioso y aburridísmo pero que para vos es gratificante y significativo
No importa el camino que elijas seguir, todos van a traer sus problemas, sus obstáculos, sus obligaciones y sus sacrificios. Al igual que su parte ‘divertida’.
Pero a lo que quiero llegar hoy es que no tenés que basar tu decisión pensando en qué es lo que más te divierte.
Tenés que centrarte en el lado B, eso que dije más arriba: los problemas, obstáculos, obligaciones y sacrificios, que trae ese camino.
Por ejemplo:
Yo era un apasionado por el fútbol. Estaba dispuesto, o creía que estaba dispuesto, a hacer los sacrificios necesarios, a cumplir con las obligaciones que traía, a enfrentar los obstáculos que se presentasen.
El fútbol me encantaba (y me encanta). Pero no fue hasta que estuve lejos de mi familia, de mis amigos, o cumpliendo con ciertas obligaciones que no me terminaban de cerrar, que me di cuenta que quizás no era lo que quería.
Quizás podía ser suficiente con simplemente divertirme jugando con mis amigos los fines de semana.
Hay muchas cosas que me gustan o que me interesan. Pero no por todas estoy dispuesto a lidiar con lo que cada camino trae.
Me interesa mucho la relación que hay entre diferentes mercados financieros, pero no estoy dispuesto a hacer un análisis y escribir un reporte sobre el impacto de la última subida del precio del petróleo.
Me cautiva la historia, puedo escribir o leer algo al respecto, pero no estoy dispuesto a hacer investigaciones o dar clases sobre las consecuencias sociales y culturales del comercio de esclavos en latinoamérica.
Me gusta la programación, porque podés crear cosas con código y parece magia, pero no estoy dispuesto a trabajar debugeando fallas, intentando entender el código de otra persona, o mapeando APIs.
Entonces, si estás buscando tu pasión pensando en qué cosas te gustan…
Dejá de hacerlo.
En su lugar, tomá cada interés y pensá:
¿Cuáles son los problemas que hay que resolver, los obstáculos que hay que atravesar, las obligaciones que hay que cumplir y los sacrificios que hay que hacer en este área?
¿Estoy dispuesto a enfrentar eso?
Si no pensás en qué obstáculos estás dispuesto a enfrentar, puede que:
Te encierres en un área que creías que te gustaba pero que trae obstáculos que odiás enfrentar o…
Que no te decidas por ningún área porque todas traen obstáculos y creés que tu pasión no debería traer dificultades.
(Y entonces cuando se pone difícil, cambiás de área, porque creés que no es lo tuyo).
Pero esta mirada no soluciona el problema de no saber qué elegir. Simplemente cambiamos en qué nos enfocamos para tomar una decisión.
Sí, trae ciertos beneficios.
Porque vas a tener una perspectiva más amplia, parámetros más claros para elegir qué querés probar, y vas a estar mejor predispuesto y motivado para enfrentar dificultades que vos elegiste conscientemente.
Que es un avance.
Pero aún así, seguís en una situación parecida. La pregunta sigue siendo:
“¿Cómo sé qué elegir?”
Vamos a eso.
Dónde encontrar tu pasión
“Esperar que sea fácil es lo que lo vuelve mucho más difícil de lo que realmente es.”
El primer punto está en entender que no debería ser fácil. Tener eso en cuenta te va a ayudar a enfrentar y atravesar miles de frustraciones.
La mejor manera de sentir que estás haciendo algo que importa es haciendo algo difícil. Pero para eso es crucial tener bien claro cuáles son tus motivaciones (como vimos en la parte 1).
¿Por qué hago énfasis en que no debería ser fácil, lindo o placentero?
Porque tu pasión está detrás de un problema.
La vas a encontrar detrás de:
Un desafío
Una tensión
Un conflicto
Una injusticia
Una pregunta sin respuesta
Un patrón que te obsesiona entender.
Seguir tu pasión no es vivir ‘la vie en rose’. Es un enfrentamiento constante.
Y me enfoco tanto en que sigas tu curiosidad y en que conectes con vos mismo porque eso es lo que te va a revelar tu pasión.
Por lo general, tiene mucho que ver con tu propia experiencia, con esas particularidades que te llaman la atención y en las cosas que no podés parar de pensar.
Para darte un ejemplo:
Yo luché mucho contra el problema de encontrar lo que me gusta. No saber qué camino tomar me paralizó de tomar muchísimas decisiones. Me generó grandes dudas, cuestionamientos, confusiones.
Entonces, emprendí esta búsqueda por encontrar qué es lo que hace a nuestro destino, pasión, propósito. Como lo quieras llamar.
Me vuelco profundamente en mis intereses porque creo que me guían hacia entender cómo trabajar sobre esta obsesión particular que tengo con encontrar el verdadero camino de cada uno.
Porque también entiendo que no encontrar lo que te gusta, es un problema que se le presenta a la gran mayoría. Un problema al que quiero contribuir y aportar en resolver.
No sólo para vivir con mayor sentido, sino también porque creo que es donde cada uno puede contribuir, crear y desplegarse al máximo.
Entonces, me apoyo en mis intereses (la psicología, la filosofía, la educación, la neurociencia, y varios más), para tomar cosas que me ayuden a combatir esa pregunta sin respuesta, ese patrón que me obsesiona entender, ese conflicto sin resolver.
Y no todo te va a salir fácil o se va a ver tan claro.
Muchas cosas te van a empezar a gustar recién cuando te vuelvas bueno en eso.
Entonces, agarrá algo que te genere un interés genuino y explorálo. Introducite en ese área y comprometete a navegarlo por dentro.
Si no te involucrás activamente, nunca vas a llegar a ser lo suficientemente bueno como para disfrutarlo realmente y destapar pistas que te revelen si el problema que querés resolver, está ahí.
De eso se trata el proyecto de investigación sobre tus intereses.
Que si querés arrancar un proyecto, pero no sabés bien cuál, no sabés bien qué te interesa, ni cómo explorar lo que te interesa…
Te recomiendo que lo hagas (y que empieces hoy). Es completamente gratis.
Pero bueno, cerremos esto.
Si hay algo que quiero que te lleves, es que… Todas las áreas traen obstáculos.
Entender cuáles son e involucrarte activamente te ayuda a entender con qué estás dispuesto a lidiar.
La verdadera pasión está en la disposición a superar los desafíos por algo que te importa.
Buscá algo que te desafíe. Pero un desafío con el que conectes.
Algo que para otros puede ser tedioso y aburrido, pero que para vos es cómo un juego.
Así es como podés encontrar disfrute en el enfrentamiento constante. No todos encuentran llamativo a las mismas cosas. Apoyáte en tu individualidad.
Si querés encontrar tu pasión, no te enfoques en qué cosas te gustan hacer. Enfocáte sobre qué problemas, obstáculos, obligaciones y sacrificios estás dispuesto a lidiar.
Gracias por leer, buena semana.
Que te diviertas,
Bautista.